martes, 29 de marzo de 2016

VISTA A SANRAM: BAR BARRA Y TANGA. (ETNOGRAFIA)

La visita fue a un lugar conocido como bar barra tanga en el barrio de Cedritos. Se llama SANRAM, café bar, lugar donde las mujeres son estriptiseras como los describen ellas mismas.

Al llegar al lugar, que parecía estar cerrado, en la puerta se encontraban dos hombres altos y robustos que revisaban a quienes entraban, y en mi caso particular, se cercioraron que fuera mayor de edad pidiéndome mi documento de identidad, revisando la foto y mirándome para confirmar que yo era la de la foto del documento. Una vez claro que era mayor de edad abrieron la puerta y nos dejaron entrar al lugar con mi amigo quien me acompañaba. Al entrar, para ser sincera esperaba que fuera de una manera diferente, y más por la ubicación del mismo en el sector norte de Bogotá.

El lugar era estilo bar, todo lo que había dentro era una barra en forma de S y las sillas eran butacas metálicas. En la parte del fondo quedaban unas escaleras que llevaban al segundo piso que se podía ver desde abajo una parte de este, puesto que este segundo piso daba como hasta la mitad del lugar.

Además de ver el mobiliario en un primer momento, fue inevitable ver inmediatamente al entrar, a todas las mujeres que estaban dentro del lugar, las cuales estaban sentadas en la barra vestidas con shorts de jean y blusas descotadas, vestidos o faldas muy cortas que no les alcanzaba a llegar bajo la cola. Todas estaban como en grupos con sus celulares a modo de platica entre amigas, puesto que el lugar no estaba lleno, hecho relacionado con el día y la hora, dado que era un jueves a las 10:30pm.

Ya dentro del lugar, sentada en la primera silla que vi, que coincidencialmente era la mas próxima a la puerta, se acerca una de las niñas del lugar, saluda y pregunta que deseábamos tomar dándonos el menú del lugar, y luego se retira mientras decidíamos. Pasados 3 minutos aproximadamente nos pregunta que decidimos tomar, y va y nos lo trae.

Cuando llega con las bebidas entabla una conversación amena, resaltando la pregunta si era la primera vez que visitábamos el lugar. Al continuar la conversación basada en que tal era el movimiento del lugar los jueves y detalles sobre el lugar, la niña me dice:
¿Por qué, quieres trabajar acá? Ven, acá es muy cómodo.
A lo cual le respondo que no e inicio a hacerle mas preguntas dado que la conversación cada vez es mas fluida, de modo que me cuenta sobre los shows que realizan, los cuales valen $80.000 pesos si son en el primer piso, ellas se disfrazan y quedan en ropa interior mientras que si son en el segundo piso tienen un valor de $150.000 y al igual se disfrazan pero la diferencia es que quedan sin ropa. Ella resalta que si es en el segundo piso es mas privado ya que nadie lo ve, y este piso es exclusivo para los clientes que consumen Whisky.

Tocado el tema de los shows, le preguntamos si es común que las mujeres visiten el lugar o personas en pareja dado que en el lugar estaba una pareja que justamente estaba teniendo un show que no era pago sino por la compra de la botella antes de las 11pm lo traía incluido según nos cuenta. A la pregunta nos responde que es muy común y que casualmente el día anterior había estado con una niña y dos amigos de la niña, que recordaba se llamaba Laura, y le había hecho show a ella; momento que recuerda con risa, y seguido a ello, nos dice que paguemos un show e insiste en que tomáramos algo mas, dándonos opciones, a lo cual respondí que mi amigo porque yo estaba manejando, y ella inmediatamente dice:
“Esa es la excusa ahora, jaja”
Pedimos otra cerveza para mi amigo y seguir la conversación. Ella la trae y cuando retomamos la conversación le pregunto el nombre, y me cuenta que se llama Rosa, que es de Valledupar y lleva trabajando un año en este lugar.

Con la conversación fluida le pregunto como llego al lugar y abiertamente me cuenta que llego al lugar por una amiga que trabajaba allí, pero la razón principal fue porque vivía en Valledupar con sus papas pero eran muy sobreprotectores e iniciando la universidad que ellos le pagaban, se canso de sentirse así y les dijo que no quería estudiar allí sino en otra ciudad como Bogotá. Sin embargo, no estuvieron de acuerdo porque le decían que no le faltaba nada con ellos, que al terminar su carrera se iba a Bogotá, pero Rosa no estuvo de acuerdo, y cuenta que dejo de ir a estudiar y les dijo a sus papas que definitivamente se iba a estudiar a Bogotá, pero ellos le dijeron que no contaba con su apoyo económico si decidía irse. Rosa con sus ahorros se vino a Bogotá y empezó a buscar trabajo aunque no conseguía nada y mas por su edad en ese momento pues tenia 18 años.

Su amiga por la cual entro a trabajar ahí, al inicio le decía que trabajaba era un café bar normal, pero luego la llevo y le conto como era todo, resaltando las ganancias y mostrándole que el horario no era difícil como lo comenta Rosa, puesto que es de miércoles a sábado de 8pm a 3am y no estaba obligada a hacer shows si ella no lo quería. Así una vez finalizados sus ahorros decide probar y nos cuenta que no era complicado y se pasa bien, claro esta, no hacia shows durante el primer mes porque era raro y difícil de hacerlo, hasta que al transcurrir ese mes, noto las diferencias en ganancias que son bastantes amplias según cuenta Rosa, destacando que la semana anterior en la noche su amiga del bar se había ganado $600.000 gracias a que hizo 4 shows. Rosa comenta que no les dan comisión por trago sino por shows, y justamente se decidió a hacer shows porque la solicitaban y vio las diferencias a nivel económico.

Empieza a contar con risa su primer show donde explica que no sabia como moverse ni que quitarse primero ni nada, tan solo lo que había visto de sus compañeras, pero en el momento de hacerlo fue difícil mas que por la persona a quien se lo hacia por no saber que hacer primero. De este modo, hablando del tema, hablamos de que experiencias negativas ha tenido y nos cuenta que no son muchas, la que mas recuerda es cuando la cogen duro, y dice que si el cliente hace eso ella para el show y no continua, puesto que destaca que es normal que la toquen pero no deja que sea duro, así como que rechaza las propuestas de algo mas, que si bien este lugar no tiene ningún servicio de algo mas puede surgir la propuesta.

Durante este tiempo, la música me hace mover la cabeza, a lo cual Rosa me dice que si quiero rumbear, contándome que cuando cierren tienen planeado irse de fiesta a un lugar en Cedritos que cierran a las 5 de la mañana, y nos invita. No obstante, le digo que no pero igual gracias, porque tengo clase al otro día y es mas la música que me pone activa, pero a ese tema surge la pregunta de donde vive porque después de salir del lugar o de la rumba, ¿Cómo se iba para su casa?, y ella nos cuenta que ahora vive en cedritos a 8 min del bar en un apartamento compartido entre ella y una amiga que trabaja ahí porque anteriormente Vivian por la 167 con Boyacá, lo cual tampoco era muy lejos, pero es preferible donde viven ahora por cercanía.

Luego, hablábamos de sus papas, comentándonos que actualmente la relación es mejor que antes porque siente que hay mayor confianza con su mama, sin embargo, no saben que trabaja ahí, por el contrario piensan que es la administradora de un café bar y por eso su horario nocturno de trabajo. Rosa nos cuenta que la semana pasada su mama le ofreció ayudarle con la universidad de modo que buscara un trabajo medio tiempo en el día; y si bien la idea le suena bastante también la contrasta con las ofertas laborales del mercado, donde el salario es el mínimo en horario completo, mientras que allí en Sanram en una buena noche puede ganarse lo mismo. No obstante, señala que cuando se gradué piensa dejarlo para trabajar como profesional de psicología, que es lo que estudia en la universidad.

Posteriormente, ella nos pregunta que si con mi amigo éramos pareja o solo amigos, a lo cual respondemos que solo amigos y ello da la oportunidad de hablar si tiene novio, a lo que nos dice que no con una cara un poco triste porque es muy difícil que confíen en ella por el ámbito del trabajo, siendo que ella destaca que no pasa mas de un show, aunque nos cuenta que su amiga por la cual entro a trabajar en Sanram ya no trabaja en el lugar porque consiguió novio ahí en el bar y se fueron a vivir juntos, y actualmente viven. Además nos cuenta que es difícil el tema de relaciones pero no imposible, puesto que su exnovio lo conoció ahí y era medico, él entendía a lo que se dedicaba y conocía los horarios, pero tenia claro que no pasaba de ser un show por dinero a otras personas, por lo cual siempre a las 3am hablaban y la acompañaba por celular hasta que llegaba a su casa. Claro esta que los problemas se daban cuando después de salir en la madrugada no se iba para su casa sino que se iban a rumbear con sus amigas, y por situaciones de estas terminaron su relación, nos comenta.

Ahora bien, conociendo de la vida de Rosa y habiendo hablado del lugar, hablamos un poco de la música y del movimiento del bar dado que estaban llegando mas personas, y de su mejor amiga, Natalie, que durante todo el tiempo pasaba a darle shots de Whisky contándole que el señor que estaba con ella anteriormente le regalo la mitad de la botella al irse. Y así, pasados unos minutos, nos despedimos de Rosa, y ella nos dice que nos vaya bien y que nos espera cualquier otros día que queramos ir.

De este modo, salimos del café bar Sanram, comentando lo amena y sociable que había sido Rosa con nosotros, y pensando que ella al no ser el prototipo de mujer operada pasaría desapercibida por los hombres que la conozcan y no seria fácil saber en lo que trabaja.

Por otra parte, pero no menos importante, cabe señalar que en el bar es inevitable ver la mirada de los hombres hacia las mujeres, a todas al pasar es como si fuera un scanner y poco agradable desde el punto de vista externo siendo que son vistas como un objeto de placer.




No hay comentarios.:

Publicar un comentario